jueves, 28 de enero de 2010

LIBRO TERCERO: LAS PROFUNDIDADES

Lo hacías, seguramente


¿De qué será este dolor de agua, parecido a un estancamiento peligroso al calor, un acento de lo femenino, como si todo tuviera lugar en la panza?
Agarré un paño y me cubrí los riñones de blanco y al mismo tiempo que transpiraba bebía del manantial para ver si nacía Pegaso y nos llevaba a un lugar de silencio. Y no te culpo por este fastidio ni por las cosas graves, como no decidir el tono de las palabras: de fe o el más yermo de los desiertos.
Yo si pudiera tomaría partido, aunque ando también de un estado al otro ya que me es imposible ahogarme con la corriente o cantar desde la risa como un pájaro. Son las ansias de saber lo que impide que me deje como cuando éramos chicas, y con las piernas estiradas y los brazos en cruz inflábamos las costillas y quedábamos suspendidas, una forma de aguantar el peso propio y el cielo sobre los ojos, vos también lo hacías, seguramente.

jueves, 21 de enero de 2010

LIBRO SEGUNDO: LAS EXPLORACIONES POLARES

Las condiciones de vida del Buenos Aires tropical son muy rigurosas: “oscuridad, promiscuidad, ventilación difícil y raciones alimenticias” de chocolates y frutas.
Soportamos la lluvia agarrados de un sólo paraguas, pero esta lluvia busca la ropa por todos los frentes y ya no queda un lugar seco donde guardarse cuando el agua de la noche duele. Pega como las nubes de mosquitos en brazos y piernas. Los bichos aparecen con sus patas que traman algo (no decido si pisarlos o con las puntas de los pies caminar hasta alejarme sin que se den cuenta).
Con tanto calor no es posible prever cuál será el porvenir lejano de la Antártida, o qué cantidad de hojas se quemarán en este otoño, amontonadas, como pirámides deformes a la vista de los perros y los hacedores de humo.

jueves, 14 de enero de 2010

Desprendía partes en el camino

Desprendía partes en el camino
Sobre todo palabras
Traducía mi cuerpo en letras
Sobre otro
Como queda estampado con el calor
Un dibujo, una noche
Para que no nos olvidemos
De querer
Hasta casi quemarnos
En la luz

jueves, 7 de enero de 2010

Paréntesis uruguayo (Tío Tom)

Paisajes de Tío Tom



Colores nítidos de mediodía
Sobre el río que entra al mar
La playa nudista era
Una pintura metafísica.
(nosotros no nos desnudamos)


Mientras volvemos
La arena se llena de lluvia
En tu hombro
El agua que besé
Como un recuerdo.
(la lluvia trajo con las horas malestar)


Mis piernas a la tarde
Lentejuelas que deja la luz
En su paso por la esterilla.
(a veces la esterilla es un momento de ahogo)


Una y mil veces
Nuestras cabezas
En el abrazo un cuenco
De dos cuerpos apretados
El viento gira.
(en el abrazo también el vértigo)